Una película de Minecraft (2025) de Jared Hess

Acción al cuadrado

Era cuestión de tiempo, e incluso puede haber llegado con cierto retraso. Pero el trending del que el videojuego fenómeno mundial Minecraft lleva gozando en los últimos años era ya merecedor de su propia película, como lo fue en su día Angry Birds o Emoji: La película o, en contrapunto, de la que se libró Plantas contra Zombies, por ejemplo.

Bienvenido al mundo de Minecraft, donde la creatividad no sólo ayuda a crear, sino que es esencial para la supervivencia. Cuatro inadaptados -Garrett "El Basurero" Garrison (Jason Momoa), Henry, Natalie y Dawn - se encuentran luchando con problemas ordinarios cuando de repente se ven arrastrados a través de un misterioso portal al Mundo Exterior: un extraño país de las maravillas cúbico que se nutre de la imaginación. Para volver a casa, tendrán que dominar este mundo (y protegerlo de cosas malvadas como Piglins y Zombies, también) mientras se embarcan en una búsqueda mágica con un inesperado experto artesano, Steve (Jack Black). Juntos, su aventura desafiará a los cinco a ser audaces y a volver a conectar con las cualidades que hacen que cada uno de ellos sea único y creativo... las mismas habilidades que necesitan para prosperar en el mundo real.

Ya desde el inicio de la historia, se nos pone en antecedentes de lo que vamos a ver; una vaga adaptación de las aventuras vistas en los dispositivos jugables, con un grado de comedia apto para todos los públicos y con unos protagonistas tan horteras como histriónicos. Pero es que tanto Momoa como Black parecen desplazarse en una nube encarnando a unos personajes lunáticos, que se salen de la norma de este tipo de producción y que perturbarán a más de un infante. Pero dicho esto y con todo, la película es más que inofensiva. Con esto me refiero a que no solamente sea más que apta para todas las edades, sino que es especialmente infantil (que no tonta) y los más peques la disfrutarán durante su visionado, ya que puede que unas horas después, solo la recuerden cuando jueguen al videojuego.

Tampoco es que sea un cuento de hadas, la cinta tiene un buen surtido de secuencias de acción y batallas violentas, pero con la cantidad de horrores y lindezas a las que los pre púberes tienen acceso hoy en día desde los smartphones (o bien suyos o de sus progenitores) los momentos más agresivos de A Minecraft Movie serían el equivalente a Los Teletubbies de hoy en día. Cualquier día veremos Tik Tok, La película.

En resumidas cuentas, entretenimiento pasajero que cumple su cometido, sobre todo para los más pequeños o los niños rata adictos al juego, pero que carece de la chispa que podría esperarse de un evento que hace no tanto dominaba el mundo en casi todas nuestras pantallas, de una forma u otra.